Will Smith está reflexionando sobre sus fracasos y luchas como padre de tres hijos.
Apareciendo en la edición del Día del Padre de la serie de Facebook Watch de su esposa Jada Pinkett Smith «Red Table Talk», el actor de Hollywood habló con franqueza sobre «el verdadero peso de la paternidad».
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Según la estrella de «Bad Boys», que tiene a Jaden, de 21 años y Willow, de 19, con Pinkett Smith y Trey, de 27 años, desde su primer matrimonio con Sheree Fletcher, sus «instintos de paternidad» entraron en acción cuando era solo un niño.
«Desde el momento en que tenía seis años, quería ser padre«, dijo el hombre de 51 años. «Me encantó cómo era mi familia, pero había deficiencias críticas masivas en la crianza de mi padre que quería corregir. Cuando tenía 10 años, recuerdo haber mirado a mi padre y pensar que podía hacerlo mejor que él«.
Durante la conversación íntima uno a uno, Will Smith habló sobre un capítulo desafiante en su relación con su hija Willow, que resultó ser una experiencia transformadora.
Willow encontró fama en 2010 a la edad de 9 años con su gran éxito «Whip My Hair». Pero cuando las extenuantes demandas de la gira comenzaron a pasar factura, le preguntó a su padre si podía abandonar la gira de 30 presentaciones.
«Ella seguía preguntando; ella estaba como: ‘Papi, ¿no importa cómo me sienta?‘ Y le dije: ‘Sí, bebé, sí importa cómo te sientes, pero tienes que terminar lo que empezaste‘», le dijo a Pinkett-Smith.
Will Smith estaba convencido de que él estaba haciendo lo correcto por su hija con su «mentalidad militar» hasta que ella se afeitó la cabeza en un acto de «protesta».
Al recordar el punto de inflexión, dijo: «Mi deseo por ella estaba anulando su propio deseo para ella y tuve una verdadera epifanía sobre eso y lo mal que una persona te odiará si sigues forzando tus deseos en su vida«.
Dijo que el grito de ayuda de su hija fue el catalizador para cambiar su estilo de crianza y ella «me presentó a los sentimientos».
Will Smith también se emocionó al reflexionar sobre convertirse en padre por primera vez, a la edad de 24 años.
«Creo que ese fue mi primer momento del peso real de la paternidad», dijo. «Lo traje a casa (Trey), y recuerdo que lo pusimos en la cuna… y fue como un terror absoluto. Fue como, ‘Soy totalmente responsable de esta vida‘. Solo lloré mucho. Me hace llorar en este momento”.