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A que no adivinas: ¿cuántos caballos hay?

Últimamente, se ha puesto de moda en internet descubrir en una imagen el número de osos pandas, de tigres o de perros escondidos en un fondo, para saber si tienes buena vista o si observas con atención. Pero este tipo de imágenes no son nuevas.

Desde los tiempos de la edad de Piedra, se han encontrado muestras de este tipo de “ilusiones ópticas” e imágenes de camuflaje. Para demostrarlo, te mostraremos una pintura hecha en 1979, que parece hecha en estos tiempos de la moda del camuflaje en internet.

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Adivina en la imagen a continuación ¿cuántos caballos ves?

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En la imagen anterior, vemos varios caballos “Pintos” en una montaña con nieve. Y nos preguntamos ¿Cuántos hay?. Quizás parezca obvia la respuesta, pero si te fijas bien, no es tan fácil dilucidar el número de ellos, ya que están muy bien mezclados con el fondo montañoso.

Cuando intentas descubrir el número, ya no sabes si lo que ves es una roca, una parte de la montaña, el lomo o la crin del caballo, dándote cuenta de que la respuesta no era tan sencilla como pensabas inicialmente.

Este cuadro fue realizado por la artista plástica Bev Doolittle, ella es un artista estadounidense que trabaja principalmente pinturas en acuarela. Sus temas son los nativos indígenas norteamericanos, animales salvajes, paisajes y caballos.

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Una característica esencial de su arte es lo que ella llama: «técnica de camuflaje» en la que ciertos detalles de su arte se puede ver en más de una forma, donde se mezclan la figura y el fondo, por ejemplo, en «El bosque tiene ojos», las rocas y cascadas también aparecen como los rostros de los nativos americanos cuando se ve desde la distancia.

Su obra más impresionante es una colección de veinticuatro pinturas de caballos de color marrón oscuro fijados contra las rocas de color marrón claro y blanco que, desde la distancia y dispuestos en orden, especifica las palabras «Hide and Seek» (Escondite).

La inspiración para hacer estas pinturas, como la que vimos en la imagen previa, ocurrió al estar un día en un prado y se percató de que era observada detenidamente por un grupo de caballos marrones.

Le fascinó la idea de ser observada de ese modo, así que pensó en hacerlos Pintos y mezclarlos sobre un fondo de una montaña rocosa para que ellos  pudieran “observar” antes de ser “vistos”.

«Yo estaba observando un pequeño grupo de caballos Castaños en un prado cubierto de hierba cuando me di cuenta de que me estaban observando. Esto parecía una situación interesante para una pintura».

«También pensé que sería divertido poner a los caballos a observar, al espectador, ¡antes de poder encontrar los caballos! Así que empecé a pensar en formas de camuflar a los caballos. Los Castaños se volvieron Pintos y la pradera cubierta de hierba se convirtió en un contexto de rocas y nieve”; explicó Bev Doolittle.

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Así surgió esta serie de pinturas sobre caballos Pintos, cuyo patrón machado es de color blanco y marrón, los cuales se confunden en el fondo y también parecen taparse unos a otros, por eso necesitamos observar con cuidado para descubrir el número de ellos.

Ahora te daremos la respuesta: hay cinco caballos, parecen más, pero las cabezas de estos caballos están de frente y sólo son cinco.

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¿Acertaste? ¿O crees que tampoco nosotros encontramos la respuesta correcta?

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