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Para qué sirve la niacinamida: Un aliado para tu piel

La niacinamida es un ingrediente muy utilizado en la cosmética. Y realmente es un aliado para tu piel. Descubre para qué sirve la niacinamida y sus beneficios para la piel del rostro.

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Imagen de silviarita en Pixabay

Qué es la niacinamida

La niacinamida es una forma de vitamina B3 soluble en agua. Se encuentra en diferentes tipos de alimentos tales como levadura, leche, huevos, legumbres y cereales. También en suplementos alimenticios del complejo B. Y en los últimos años se ha añadido a diferentes productos de la cosmética facial.

Debido a que su peso molecular es bajo, se emplea en productos para el cuidado de la piel del rostro ya que penetra fácilmente en la capa superior de la piel. Es una sustancia estable que puede ser tolerada por distintos tipos de piel, incluida la piel sensible.

Para qué sirve la niacinamida: Beneficios

La niacinamida aporta muchos beneficios para la piel además de ser antioxidante y antiinflamatoria. Entre ellos cabe destacar:

Para qué sirve la niacinamida: Reducir el acné

Esta sustancia ayuda a regular el sebo en la piel del rostro. De igual manera, por su acción antiinflamatoria, previene el enrojecimiento por lo que es apta para pieles sensibles. Del mismo modo, contribuye a eliminar las manchas y cicatrices en la piel del rostro.

Para qué sirve la niacinamida: Reforzar la barrera protectora de la piel

La niacinamida estimula la producción de ceramidas que fortalecen la capa exterior de la piel. En este sentido, la protegen de las agresiones y de la contaminación externa.

Antioxidante

Por su acción antioxidante, protege a la piel de la acción de los radicales libres y de los rayos solares. Así mismo, evita el fotoenvejecimiento. Y disminuye la aparición de arrugas y líneas de expresión. También, estimula la producción de colágeno para darle firmeza y elasticidad a la piel.

Cómo utilizarla

Como es altamente tolerada, la niacinamida puede ser usada en todos los tipos de piel. Sin embargo, hay que usarla en bajas concentraciones y que no se haya convertido en ácido nicotínico, ya que este último puede ser irritante para la piel.

También se recomienda usarla en presentaciones que se adapten a cada tipo de piel. Por ejemplo, las pieles grasas o mixtas pueden usar presentaciones en gel. Y las pieles secas o maduras, en crema. Ante cualquier duda consulta a un dermatólogo.

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